Evadir los problemas no es la solución a ellos. Armarse un mundo paralelo para no sufrir, no elimina los asuntos pendientes. Mañana puede ser muy tarde para intentar arreglar las cosas. Dejar a un lado lo que nos hace mal, no es ser más fuerte, si no todo lo contrario. Es darse cuenta de que como uno no puede hacerle frente es mejor fingir que no existe nada lo suficientemente fuerte como para destruirnos.
Abrirse paso a una vida feliz, perfecta, esta más allá de lo que cualquier mortal puede pretender. Hacer borrón y cuenta nueva, no es para nosotros. Es absolutamente difícil tratar de dejar de lado todo eso que nos mata.
Hablar los problemas, contarlos, pelear, gritar, dejar afuera todo lo que uno siente es una vía coherente. Tragandote el dolor no vas a conseguir nada, vas a sentirte solo, débil. SIEMPRE hay alguien para escuchar. Alguien que cueste lo que cueste va a estar ahí para ayudarte a resolver cada asunto de tu vida.
Cada nudo fue en algún momento una cinta lisa, hermosa y perfectamente armada. Todo nudo, puede volver a serlo. Nada como el estado inicial de las cosas. Donde no hay nada en contra ni a favor.
Los problemas tienen solución. Pero ella no es evadirlos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario